Exposición "Dios es un árbol-A" de Marta Vidal
Exposición «Dios es un árbol-A»
MARTA
VIDAL
Del
26 de
julio al
30
de
septiembre
de
2018.
Lugar:
Mucbe.
El
próximo
jueves,
26
de
julio, a las
19.00
h, se
inaugura
en
el
Mucbe (Museu Ciutat de Benicarló) la
exposición
«Dios
es un árbol-A»
de
Marta Vidal. Esta exposición
permanecerá
abierta
hasta
el
día
30
de
septiembre
de
2018.
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Dios
es un árbol-A
La palabra tiene el
gran poder de crear y cuando no puede expresar todo lo desconocido y
transcendental, nace el símbolo como lenguaje arquetípico del
inconsciente colectivo.
Para mí, el árbol es
el típico símbolo por excelencia ya que, sugiere una fertilidad
autónoma al igual que la deidad suprema.
El árbol nos habla de
la vida, de lo sagrado y misterioso, de la fortaleza y fragilidad al
mismo tiempo.
Cuando se nombra se
crea y creación implica nacimiento a partir de una ruptura. La A es
la semilla que germina, la que rompe, la que se empodera y crea
nuevos mundos devolviendo el poder a quien siempre lo tuvo.
Marta Vidal
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La
mujer ha estado asociada durante mucho tiempo con la Naturaleza.
Metafóricamente, como la "madre Tierra", la mujer ha sido vista
como una figura con dos caras: una, la de un ser que da y cuida de la
vida; otra, la de un ser incontrolable, responsable de fuerzas
capaces de destruir. La creación y la deconstrucción resultan
esenciales para entender la naturaleza de la feminidad o la feminidad
de la Naturaleza. Sin embargo, a lo largo de la historia, esta
relación mítica y, si queremos, ontológica entre Naturaleza y
feminidad ha sido reducida en nuestras sociedades al ámbito
doméstico.
La instalación de
Marta Vidal retoma el imperativo de recuperar la relación ontológica
entre Naturaleza y mujer. Un parada que nos obliga nuevamente a
cuestionarnos los términos culturalmente construidos de identidad,
poder y lenguaje. Para ello utiliza la figura del árbol. El árbol
blanco, representa la mujer. Una mujer que surge de la tierra,
renovada, liberada de todos los condicionantes sociales que ha ido
adquiriendo a lo largo de la historia. Una mujer capaz de erigirse y
construir un lenguaje nuevo. Este acto originario queda representado
por la figura central de la exposición. El árbol originario, con la
letra A en el centro, denota ese acto creador fundamental: la puesta
en juego de la primera letra. Sin embargo, esta letra adquiere
presencia a través de un acto de ruptura. Toda creación parte de
una relación traumática con el contexto existente; con lo que
fuimos, con lo que se asentó en nosotros y nos constituyó durante
años. Esta destrucción, por tanto, no es una acto superficial, ni
contextual, ni coyuntural, ni accidental. Es un acto esencial y
necesario. Un acto que afecta nuestro tronco vital. No es posible
crear algo nuevo sin dañarnos. Solo agujereando las convenciones que
se han instalado en nosotros, podremos comenzar este nuevo universo
simbólico. Marta Vidal nos presenta su universo, un universo que tal
y como muestra su obra, no ha estado exento de fracturas.
Wenceslao García
Puchades (Filósofo)
Creat per
david el
23/07/2018